March 28, 2007

lost 1937

En 1937, una expeción en Chiapas buscaba unas ruinas que habían sido reportadas por campesinos a las faldas de una sistema montañoso. A pocos minutos de llegar, una tormenta los obligó a tomar refugio en una cueva. Al sentirse seguros, decidieron acampar ahí por esa noche. Pero el terreno inundado los obligó a adentrarse en la cueva hasta un slugar seco donde pasaron la noche. Al amanecer, notaron que la cueva tenía una salida del otro lado e impulsados por la curiosidad dos de los cinco exploradores fueron a echar un vistazo. Al salir de la cueva, se dieron cuenta de que el piso rocoso que estaban pisando era distinto, como pulido... Notaron que las paredes estaban pulidas también. Ante el asombro, se alejaron de la salida de la cueva, hacía lo que notaron era una especie de "crater" dentro de la montaña. Al llegar al otro extremo del interior de la montaña y darse media vuelta, lograron ver que todo un lado de la montaña estaba decorado con motivos mayas, con un hombre gigante que los miraba y que señalaba hacía su vientre que estaba enterrado... Obiviamente, el equipo documentó fotográficamente el descubrimiento, pero al regresar de ese lugar, un deslave en una montaña hizo rodar su vehículo por una montaña. Ninguno de ellos sobrevivió, pero alguien recupero, por no decir robó, sus pertenencias. A nosotros solo nos llega esta foto, bastante maltratada y seguramente fotografiada de la original.



A juzgar de varios expertos, en lo que los expedicionarios están recargados es una estela maya que muy probablemente no fue colocada ahí junto con el coloso, ya que parece ser que la escultura continúa hacía abajo, lo que quiere decir que esta obra fue realizada mucho antes del expledor y tradición maya de fechar los monumentos.
Lo importantes es que se debe de encontrar este lugar de nuevo y explorarlo, ya que tira a piso todo lo que creemos saber sobre esta majestuosa cultura.

1 comment:

Anonymous said...

Yo había escuchado algo de un lugar en Chiapas, con una escultura maya gigante dentro de una montaña, pero nunca había visto imágenes de eso. ¡Es sorprendente!